Libro de chistes cortos buenos

-Cuando llegue el juicio final -decía el predicador- habrá rayos y truenos. Los ríos nos inundarán, habrá terremotos, y lloverá fuego del cielo. Un niño que pasaba por allí con su madre, se vuelve hacia ella y dice: -¿Ese día no tendremos colegio, verdad mamá?