Libro de chistes cortos buenos

Era un cartero que va a una casa y ve un aviso donde dice: Cuidado con el loro. Más cerca de la puerta ve otro cartel que dice: Loro muy peligroso. Muy cerca de la puerta ve otro cartel más: No moleste al loro. Finalmente el cartero abre la puerta y entra y ve una jaulita con un lorito pequeño y medio desplumado con otro cartel más de advertencia. El cartero se ríe y toca la jaula despreciando al lorito, y entonces va el loro, golpea el suelo y llama a su perro: -Sultán, mata.