Libro de chistes cortos buenos

En un confesionario lleva una joven y dice: -Padre, me acosté con Paco! -Pues en penitencia, echa 5 euros al cepillo. Al otro día llega otra joven: -Padre, me acosté con Paco! -Pues en penitencia echa 5 euros al cepillo! Y así todos los días, hasta que un día llega un joven al confesionario y le dice: -Yo no vengo a confesarme, soy Paco, vengo a negociar con usted esas penitencias, o me cambio de parroquia!